En el gran cuarto blanco...

En el gran cuarto blanco,
Entre sollozos y maquinas que respiran
Tengo mi propio motivo…

Recuerdo lo que se dice por ahí:
No te das cuenta cuanto les quieres, hasta que hay riesgo de perderles…
¡Ha de acudir este pensamiento precisamente cuando le tomo la mano!,
Y he de dudar sobre el pedir al cielo el favor de no tenerle ahí.
Por que me resulta absurdo y contradictorio…
¡Lo digo! que importa, si, si o si no…

Y dudo si salirle con esa mierda al viejo…

Digo:
Soy otro más
Veo a mí alrededor hay otros rostros afligidos,
Entonces sonrió...

Que coctel tan raro de sentimientos…