Estaba como hacia una semana, desde entonces en la misma hora y banca en una estación de autobuses.
A su lado una mochila vieja y sobre ésta una chamarra, en sus manos un libro de Hess.
Ahí pasaba una o dos horas con un café instantáneo tomando sorbos pequeños, mirando los letreros de múltiples destinos, mirando a la gente ir y venir.
Todo empezó hace dos años con una llamada al celular en una larga fila de desempleados y estaba ahí sentado tratando de encontrar las pelotas necesarias para abordar cualquier destino.
Algo se parecía a la completa libertad: nada de oficinas, nada de tarjetas bancarias, nada de jefes y sus achichincles, no gobierno, nada, nada…
Comprendía como nace el vagabundo…
Era ésta mi vida, mi n oportunidad de romper cadenas…
No es donde se está, ni lo que se haga, siempre regresa uno a donde estaba…
¡Que calamidad brincar a lo que venga!
¡Nunca había raíces! Y por tanto grito de mi herencia patrones de conducta que ahora estallan! entrando en la paradoja de personal de mi mundo libertad!
¡Aun no era su tiempo!, debía esperar…
Así nacen los fantasmas en la estación…
Así estos ojos verán al mundo…
1 animados:
Si esos ojos ven al mundo asi.........afortunado su dueño (creo).
Un saludote Navawan!
Publicar un comentario